Los vehículos electrificados, y en particular los vehículos eléctricos de batería, dependen de su gestión térmica. El proveedor Continental presentó la próxima generación de su propio sistema de gestión térmica en la Global Future Mobility Conference & Expo 2018 en Hangzhou, China. La producción en serie comenzará en China a finales de 2019. ¿Sabías que Crestanevada compra tu coche con la mejor tasación online del mercado?
Control ideal del calor para una mayor autonomía eléctrica
Es precisamente aquí donde existe actualmente una demanda especialmente elevada de vehículos electrificados y, sobre todo, totalmente eléctricos. En resumen, una buena gestión térmica puede marcar la diferencia entre una larga y una corta duración de la batería. En un sistema de este tipo, la generación de calor y los flujos de calor están controlados. Los vehículos eléctricos se benefician especialmente de ello, pero las transmisiones convencionales también pueden ser más eficientes. En el caso de los vehículos eléctricos, sin embargo, la autonomía puede mantenerse a un nivel superior incluso a bajas temperaturas, y los ciclos de carga también pueden acelerarse.
Un cuarto más de autonomía a -10° Celsius que los sistemas actuales
Continental ya ha suministrado las bombas y los sensores necesarios. Una novedad son las válvulas reguladoras de caudal de refrigerante (CFCV), que permiten interconectar de forma flexible circuitos de calefacción y refrigeración. Además, hay mangueras o tuberías que también pueden equiparse con sensores integrados (Smart Rubber). Una simple comparación con los vehículos eléctricos pone de manifiesto sus ventajas. Los vehículos eléctricos actuales pierden hasta el 40% de su autonomía a -10° Celsius, frente a los 20° Celsius de temperatura exterior. El nuevo TM de Continental promete un aumento de la autonomía a -10°C de alrededor del 25 por ciento. Así, las pérdidas en comparación con 20°C son sólo de un 15%, lo que es bastante aceptable.
«En invierno y pleno verano -cuando hay una gran demanda de refrigeración o calefacción-, la autonomía de un vehículo electrificado disminuye considerablemente porque la electricidad para la calefacción o la refrigeración también tiene que tomarse de la batería de iones de litio. A -10 °C, por ejemplo, se necesita hasta un 30% de la energía eléctrica almacenada para calefacción. La gestión térmica sirve para permitir el mayor calentamiento y enfriamiento posibles sin recurrir a la batería». – Continental
Llevar rápidamente el sistema de baterías a la ventana de temperatura ideal
Según Continental, la ventana de temperatura ideal para una batería de iones de litio se sitúa entre 25 y 35 °C. Puede absorber mucha electricidad, por ejemplo mediante carga rápida o recuperación, pero también liberar mucha electricidad durante la conducción. Sin embargo, a temperaturas bajo cero o elevadas, no puede funcionar bien en ninguno de los dos sentidos. Los nuevos componentes TM garantizan que la batería alcance rápidamente la temperatura ideal y vuelva a enfriarse si es necesario. Esto ayuda a la carga, por ejemplo, porque la refrigeración activa permite que la corriente de carga se mantenga constantemente alta, ya que la temperatura de la batería se mantiene gracias a la refrigeración y no es necesario estrangular la corriente de carga.
«Esto requiere circuitos de refrigeración flexibles e interconectables y bombas y válvulas multipuerto muy duraderas, silenciosas y de bajo consumo. Nuestras nuevas válvulas de control de flujo de refrigerante pueden interconectar proporcionalmente de dos a cuatro circuitos. De este modo, el calor o el frío disponible llega donde lo necesitas». – Peter Biber, Director de la Unidad de Sensores y Actuadores de China